Lifting facial con hilos tensores, una alternativa al paso por el quirófano
A medida que pasa el tiempo y envejecemos, nuestra piel va perdiendo firmeza, tersura y elasticidad, mientras se produce una pérdida de colágeno y grasa facial. Todo ello desemboca en la tan temida flacidez y en las indeseadas arrugas. Las áreas de la cara más afectadas suelen ser las mejillas, las cejas y otras zonas alrededor de los ojos, el cuello y la papada. El lifting facial con hilos tensores es una muy buena opción si lo que quieres es minimizar los efectos antes citados. El rejuvenecimiento facial es uno de los tratamientos que más se realiza en las consultas de medicina estética de todo el mundo.
Hace años, el único tratamiento con el que contábamos era el lifting facial, es decir, el tratamiento quirúrgico de la cara. Es evidente que la cirugía facial siempre produce respeto. Además, no se puede ocultar, por lo que el postoperatorio resulta muy evidente. En la actualidad, los hilos tensores tratan de paliar el efecto del paso del tiempo en nuestro rostro y son efectivos en casos leves de flaccidez. Es decir, en pacientes de elevada edad o con importante flaccidez los tratamientos no invasivos no les serán de gran ayuda, resultarán poco efectivos y, en definitiva, caros.
¿Qué son los hilos tensores?
Se trata de una técnica no intrusiva muy segura, indolora, cuyo principal fin es el tensado cutáneo mediante la inserción de hilos en la dermis con una aguja guía. La principal ventaja reside en que no requiere de un largo reposo tras su aplicación y, además, no es necesaria la hospitalización del paciente ni el uso de anestesia general. Normalmente se suele aplicar anestesia local en pomada.
Resultados
Los efectos del lifting facial con hilos tensores son instantáneos y se consigue reafirmar y fortalecer la piel de la zona tratada, otorgándole un aspecto muy natural y saludable. El resultado definitivo se obtiene cuando se forma el colágeno, entre 2-4 meses después de la realización del tratamiento.
El rejuvenecimiento suele durar, dependiendo de la tipología del paciente, hasta 18 meses, aunque una de las ventajas de esta técnica es que se puede volver a aplicar para llevar a cabo retoques que logren mantener los efectos.
¿A quién se recomienda este tipo de lifting sin cirugía?
Los mejores candidatos para someterse al tratamiento con hilos tensores reabsorbibles son las personas con signos leves de envejecimiento o flacidez que solo requieren un pequeño empujón. Por lo general, el perfil más habitual suelen ser mujeres de entre 35 y 45 años afectadas por los primeros efectos del paso del tiempo como la aparición de valles de lágrimas, flacidez en la piel de las mejillas o cejas y bolsas debajo de los ojos o en el cuello.
¿En qué casos no se recomienda el lifting facial con hilos tensores?
Si bien es cierto que este tipo de tratamiento se puede aplicar a cualquier tipo de persona, existen una serie de aspectos que hay que tener en cuenta:
- Aquellos pacientes que experimentan una excesiva flacidez de la piel a una edad avanzada mostrarán una mejora muy limitada.
- Tampoco se apreciará una mejoría notable en las personas que quieran poner solución al descolgamiento de la piel consecuencia de la obesidad o el sobrepeso.
En Clínica Rodríguez Recio somos expertos en lifting facial con hilos tensores por lo que si estás planteándote realizar este procedimiento, no dudes en solicitar una primera cita sin ningún tipo de compromiso, donde valoraremos tu caso y te propondremos la mejor solución posible que se ajuste a tus necesidades y bolsillo. Puedes solicitar tu cita aquí.